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Estrategias clave para que las pymes enfrenten con éxito la planificación de su presupuesto 2025
Pymes deben prepararse para 2025, considerando costos, imprevistos y estrategias financieras para adaptarse a un entorno económico incierto y competitivo.
Con el cierre del año a la vista, las pequeñas y medianas empresas (pymes) se enfrentan a la necesidad de planificar adecuadamente su presupuesto para el año 2025. Esta planificación financiera no solo les ayudará a abordar los desafíos económicos que puedan surgir, sino también a identificar nuevas oportunidades de crecimiento. Para lograrlo, es crucial que los emprendedores ajusten sus proyecciones, anticipen cambios en el entorno económico y tomen decisiones informadas a fin de mantener su competitividad en un mercado en constante cambio.
El actual contexto económico, caracterizado por la inflación, la fluctuación de las tasas de interés y posibles cambios regulatorios, obliga a las empresas a ser más ágiles en su proceso de planificación. Un presupuesto sólido no debe limitarse a calcular ingresos y gastos; también debe considerar imprevistos, optimizar la eficiencia operativa y, en muchos casos, incorporar tecnologías que brinden un mejor control sobre la situación financiera de la empresa.
Desafíos en la planificación financiera
Las pymes enfrentan múltiples retos a la hora de elaborar su presupuesto. Uno de los más comunes es la falta de visibilidad sobre sus flujos de caja. "Muchas pymes no tienen control sobre sus ingresos y gastos, lo que complica la proyección de sus necesidades para el próximo año", comentó Diego Plaza, analista financiero tributario de Maxxa, una fintech dedicada a soluciones financieras para pymes. Esta ausencia de control puede resultar en proyecciones inexactas, lo que podría derivar en dificultades inesperadas para la empresa.
Otro de los obstáculos destacados por Gabriel Vergara, CEO de Smart CFO, es la variabilidad en los costos de insumos y la escasez de formación financiera dentro de las empresas. "El desconocimiento es uno de los dolores más recurrentes en las pymes. Muchas no tienen acceso a la formación necesaria para elaborar un adecuado presupuesto, lo cual es fundamental para su éxito a largo plazo", enfatizó. Ante esta situación, Vergara aconseja considerar la contratación de un gerente externo de administración y finanzas para asegurar una gestión profesional y dedicar más esfuerzo al crecimiento del negocio.
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Elementos a considerar en la planificación para 2025
Al comenzar el proceso de creación del presupuesto, es vital que las empresas evalúen el impacto de factores económicos externos sobre sus costos operativos y márgenes de ganancia. Según Diego Plaza, las pymes deben prestar especial atención a la inflación y las tasas de interés, ya que estas variables influirán directamente en los costos de operación y en el acceso a financiamiento. "En mi opinión, los costos, precios y márgenes son tres factores económicos que deberían tener muy en cuenta en la proyección-presupuesto para el año 2025", explicó.
El comportamiento de la inflación, que ha sido volátil en los últimos años, representa un gran desafío para el próximo año. Las empresas que dependen de insumos importados deben estar atentas también a las tasas de cambio. Plaza advierte que "las tasas de cambio son otra variable importante a tener en foco, sobre todo para las pymes dependientes de insumos importados". Planificar de manera detallada puede ser clave para mitigar sorpresas desfavorables en el futuro.
Por su parte, Vergara subraya la importancia de evaluar internamente la estructura de costos y la capacidad financiera para crear un presupuesto más preciso. "La estructura de costos es clave. Las pymes deben identificar áreas donde puedan reducir gastos innecesarios para mejorar su eficiencia financiera", afirmó.
Para gestionar los costos operativos de manera efectiva, ambos expertos ofrecen sugerencias que las empresas pueden aplicar en su planificación. Plaza destaca que "es primordial automatizar procesos de finanzas. Existen diversas herramientas que pueden hacerse pagos y conciliaciones, lo que permite liberar tiempo para áreas clave como ventas y marketing". Asimismo, recomienda realizar revisiones trimestrales del presupuesto para ajustar las proyecciones según la realidad del mercado, lo cual permite una mayor flexibilidad ante cambios inesperados.
- Renegociar contratos con proveedores para obtener precios fijos o descuentos por volumen.
- Controlar el nivel de stock para evitar el sobrestock, que puede bloquear capital.
- Considerar la implementación de un presupuesto base cero, que requiere justificar cada gasto en cada ciclo presupuestario.
Adicionalmente, esta metodología proporciona una mayor visibilidad sobre los gastos y fomenta una cultura de eficiencia en la empresa, optimizando recursos a todos los niveles.
No se puede pasar por alto la necesidad de incluir un margen para imprevistos en el presupuesto. Las emergencias operativas, como daños a maquinaria o retrasos en las cuentas por cobrar, pueden amenazar la continuidad del negocio si no existe un fondo de emergencia planificado. "La planificación de imprevistos no es solo una opción, sino que es una necesidad", advirtió Plaza.
Para Vergara, establecer un presupuesto que contemple estos imprevistos reduce el riesgo de decisiones apresuradas y asegura la liquidez de la empresa. "La planificación temprana también ofrece una ventaja competitiva a las empresas, ya que les permite mejorar el acceso a financiación y gestionar mejor las crisis", concluyó.
